LA VIRGEN DEL DADO. 
             CATEDRAL DE LEÓN

Desde el año 2017, podemos disfrutar de nuevo  de una de las puertas de la Catedral que pasaba un poco desapercibida al quedar oculta  al adorsarsele el claustro.

Se trata de la puerta conocida como la de la Virgen del Dado. Llamada así, porque según cuenta la leyenda, un capitán de los Tercios establecido en la ciudad, después de pasar la noche jugando a los dados y perder así su fortuna, al pasar por la puerta de la catedral arrojó los dados contra la imagen y dieron en la cabeza del niño, de la que brotó una gota de sangre, cayendo los dados al suelo manchados también. El capitán, arrepentido, entró en un convento de franciscanos del que no volvió a salir.

La Virgen está de pie , coronada, manteniendo  a su hijo en el brazo izquierdo y con la otra mano sosteniendo una rosa. Viste velo, manto y túnica. El niño lleva una sencilla túnica, dejando al descubierto sus pies desnudos. Mientras bendice, sujeta el libro cerrado.

A ambos lados de la Virgen, están los apóstoles Pablo, Pedro y Santiago el Mayor, en la izquierda, y la Anunciación con S. Andrés a la derecha.

En el tímpano, destaca el Salvador glorioso, y los cuatro evangelistas a sus pies.

Tras su limpieza, se han podido recuperar los colores de su variada policromía, la mayor parte del S.XVI aunque también  colores de la pintura original del S. XIII.